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—Lino Anderson, de 30 años, el mayor de cuatro hermanos—. Benjamín de 26, Las gemelas de 22

Paola y Lila —. Lino, heredó de su padre la habilidad para los negocios—. Ahora se a convertido en un AS—. Sus tres hermanos, cada uno

tiene diferentes habilidades Benjamín es especialista en robótica y tecnología—. Paola se

encarga de publicidad de marquesinas, Lila en Finanzas —. Los cuatro fueron dirigidos por Lino,

Con firmeza, templanza y autoridad, pues Lino era consciente de la falta de un padre—. Su

madre fue diseñada para hacer esposa florero.

—Guardando apariencia…soportando callada las tantas infidelidades de su padre. Nunca se quejó!

—Ahora quería que sus hijos tuvieran una

esposa, como ella—. Pero ninguno de sus hijos

consideraba esa estupidez, como Benjamín se lo hecho en cara—. Luisa su madre tenía obsesión por Daisy Morrel exnovia de Lino—. La mujer había decidido meterla a la cama de Lino como

diera lugar—. Para comprometer a su hijo en un matrimonio que ella considera beneficioso para

su categoría.

—Por su parte Lino no volverá a considerarla

ni como amiga! menos una relación por interés,

Daisy Morrel—. Una modelo de medidas perfectas delgada, piernas exuberantes, pero más fría que el Everest—. Para Luisa, perfecta esposa De Lino!. Un mes lo intentó—. Pero Daisy era la

La clásica mujer diseñada, para ser esposa trofeo

de un millonario—. Estaba arto de su madre.

— Precisamente, ahora se celebraba el aniversario de su empresa—. Su madre había organizado

con ayuda de la rubia, una gran fiesta por todo lo alto—. Habían toda clase de celebridades reconocidas—. La prensa se había hecho presente.

No había nada fuera de lugar—. Los Catering abundaban en una sección exclusiva—.toda clase

de vinos caros—. Lino se encontraba observando

Las luces parpadeando de la hermosa Ciudad de

Los Ángeles—. Desde el edificio, Cede central de su empresa A. Había hecho un imperio junto a sus tres hermanos que nunca los dejaría—. Su padre apesar de haber sido un CEO de respeto.

nunca había logrado lo que Los Hermanos CEO

Anderson—. Pero dio paso a que sus herederos

siguieran su legado.

—Desde ahí veía el movimiento del gran salón

donde cada invitado con vestimentas de

diseñadores como JIMMY CHOO,PRADA,GUCCI,

LOUIS VUITTON,ect, ect, para Lino todo eso era

Irreverente.

Aburrido? La voz de Benjamín lo hizo voltear

Tus invitados preguntan por ti—. Un respingo salió de su garganta—. Dirás de mamá Y Daisy, murmuró Lino—. Madre te puso al blanco de nuevo, sonrió su hermano—. Lo dirás de broma!

—Mamita quiere un molde a su semejanza y Daisy encaja a su ideal, Benjamín sonriente le soba el hombro.

Pobre mujer, No fue feliz y quiere que nosotros

Pagemos su fracaso.

—Se va decepcionar! no tengo intención, menos

interes en su elección—. Daisy es una mujer hermosa pero no llena mis expectativas—. Has una lista de tus gustos—. Se carcajeo su hermano

A madre le importaría un pepinillo seguirá

Intentando—. Lino resopló fastidiado.

Vamos al dichoso banquete—. Expreso caminando al salón del evento.

—Las pláticas y murmullos, se mezclaban en una sola paranoia—. Miro de reojo a las gemelas que entre ellas reían—. Seguramente fantasean como

fastidiar a Daisy—. No la soporton! Igual que a su nana que dijo que eso no era una mujer.Sonrió al recordar, como hacía gestos cuando estaba en

la Mansión familiar, invitada obviamente por su

madre.

—Qué bueno que has llegado, vamos a brindar

por el gran éxito de la fiesta—. Daisy se adelantó

Cuando lo vio venir, aconsejada por Luisa, tomó una copa de una mesera del Catering—. Le hizo una seña a Lino para que se sentara a su lado, el CEO blanqueó los ojos—. buena estrategia,

Pensó Lino, ya que lo hizo con intención para que la prensa hiciera su mejor toma.

Pero al querer tomar otra copa para entregársela,

rozó con su brazo la bandeja de la chica—. Qué hizo derramar un poco de vino cayendo sobre la blusa blanca de la asustada mesera—. Eres una estúpida!—. Gruñó Daisy con ira—. Señorita!…quiso decir algo—. Nada….Eres una inútil!…Acuso

Embravecida la mujer—. Mira has echado a perder mi ropa!—Sabes lo que cuesta una prenda como esta?—. Dijo histérica mostrando una

manchaita qué apenas si se distinguía—. Yo lo

lamento no fue intencional yo….Llama a tu jefe

alguien tiene que pagar el daño. Volvió a decir,

—Julia se puso pálida—. Se temió lo peor—. Pero Quizás su jefe la defendía al ver que no cayó

nada—. Se miró ella misma—. Su blusa blanca Tenía una gran mancha justo al frente, iría —

Primero al lavado, pensó con sentimiento pues la —modelo la había avergonzado delante de todos Intentaré removerla, murmuró.

camino intentando no llorar—. abrió el grifo para lavarse pero el agua se extendió por la tela—. Se desesperó al verla.

—Lino había presenciado todo el teatro de la

modelo—. Resopló al no poder hacer nada—. No

quería ser el centro de atención y la comida otro día—. Pero sintió pena por la chica que fue

testigo que no había hecho nada—. Tuvo la mala suerte de topar con la bruja, como le bautizaron

sus hermanas—. Se levantó con el pretexto de ir al servicio para caballeros—. Pero en el primer pasillo la puerta de servicio al público estaba semi abierta—. Y frente al espejo, la misma chica

se iba a dar la vuelta pero la imagen que veía

lo hizo exhalar sin siquiera intentarlo—. La blusa

blanca y mojada trasparentaba su sostén de

encaje—. Tenía un botón desajustado, alcanzando a ver que su busto era vasto, cabría muy bien en sus manos, su pensamiento hizo que se ajustara su pantalón de la entrepierna—. Qué le pasa?—. Se retiró inquieto se remojó el rostro

no sabía quién era ella.

Abría que averiguar.

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