Úrsula

...Narradora...

Al llegar la noche, Santiago fue el primero en abrir los ojos, luego de haber dormido por muchas horas.

Su cuerpo cómo el de Melisa terminaron agotados, así que se quedaron dormidos hasta altas horas de la noche.

Para, Santiago fue algo complicado, hacer el amor, si mover las piernas, aunque Melisa, hizo su mayor esfuerzo, para qué él se sintiera más cómodo posible.

La niña todavía era una inexperta, así, que Santiago, debía hacer todo lo posible, para no ser descubierto por Melisa.

Mientras que, Santiago intentaba levantarse de la cama, para poder estirar un poco sus músculos. Escuchó pasos acercarse a la puerta de su habitación.

Desde hace varios meses, todos los empleados tenían prohibido acercarse a la habitación, solamente Marcos, y ahora Melisa.

Son las dos únicas personas que podían llegar hasta la puerta de su habitación de Santiago.

Desde que Santiago tuvo el accidente, tomó la decisión de nadie se acercara a él. Quería estar solo, sin que nadie tuviera esa mirada de compasión, que todos mostraron el día que entró a la mansión en silla de ruedas.

Enseguida, de escuchar los pasos detenerse, la empleada comenzó hablar, sin haber llamado a la puerta ni una sola vez.

__ Joven Santiago, perdone que lo moleste. Pero hay una mujer en la entrada de la mansión, se niega a ir si no habla antes con usted. Dice qué lo que deben hablar es muy importante...

Santiago, inmediatamente, podía imaginarse quién era la mujer que estaba afuera deseando hablar con él.

Esa mujer no podía ser otra que Úrsula, y después de que habló con Paola, Úrsula no dudo ni un solo segundo en ir hasta la mansión Wlod, para convencer a Santiago de que no se case con la sirvienta.

Santiago arrugó la nariz, no tenía ninguna intención de hablar con Úrsula, después lo que acababa de suceder con Melisa.

Santiago guardó silencio, no tenía ninguna intención de hablar con la sirvienta, al otro lado de la puerta. Al no escuchar ni una sola respuesta por parte de Santiago, la sirvienta se dio la vuelta y se marchó lo antes posible.

Al no escuchar más la voz de la empleada, Santiago solo estiró su mano, para coger su teléfono que estaba encima del Buró.

Buscó el número privado de Marcos, para que sea él quién saque a Úrsula de ahí. Santiago, no quería que Úrsula se quedara mucho tiempo afuera de su mansión, su boda se llevaría a cabo mañana por la mañana y no quería que nada estropeada lo que tenía planeado.

En ese momento, Marcos se encontraba muy ocupado, llevando a cabo una misión muy importante, en contra del esposo de Úrsula.

Al escuchar su móvil sonar, Marcos contestó inmediatamente, era claro que era Santiago.

__ Señor Wlod, ¿Necesita algo?..._ Respondió Marcos sin alejar la mirada de su laptop.

La respiración de Santiago, se comenzó a escuchar agitada, eso no era nada bueno.

__ Encargate de Úrsula.

__ ¡La muy sinvergüenza se ha atrevido a venir a la mansión, después de todo el daño que me ha hecho. No la quiero cerca de esta casa, por lo menos hasta mañana!..._ Dijo Santiago con una voz extremadamente fría.

Marcos quedó en shock al escuchar que Úrsula estaba allí, después de que fue hablar con Paola.

__ ¿En verdad?... Esa mujer ha sido capaz de llegar hasta la mansión, con toda la intención de hablar contigo. Eso yo le llamó descaro.__ Respondió Marcos, con incredulidad.

Santiago se encontraba furiosa, deseaba con todas sus fuerzas levantarse de la silla, y ser él mismo quién saque a Úrsula de su casa.

Pero eso no podía ser hasta el día de mañana, cuando todos se presenten en su boda.

__¡No quiero ver a esa mujer ni un solo segundo más, afuera de esta mansión!.. Encárgate de que Úrsula se mantenga ocupada hasta mañana por la mañana. _ Santiago le ordenó a Marcos, sin importarle que Marcos estuviera ocupado.

_ Enseguida, voy a la entrada de la mansión, para dejarle en claro, a esa mujer que no puede volver a esta casa, hasta mañana al medio día... _ Respondió Marcos sin terminar la llamada con Santiago.

Marcos cerró la laptop donde estaba trabajando, para a encargarse de Úrsula. Al llegar a la entrada de la mansión, Marcos miró a Úrsula discutiendo con los guardias de seguridad.

Úrsula, todavía se consideraba toda una dama, cuando no era más que una zorra, que cambió el amor de Santiago, por la posición que Antonio le ofreció.

__ ¡¿Qué no entienden?!..

__ ¡Soy la mujer a quién Santiago ama!...

__ ¡Van a pagar muy caro, no dejarme entrar!... _ Úrsula les decía a los dos guardias.

_ Le hemos dicho amablemente, que debe retirarse... _ Contestó uno de los guardias...

Marcos se detuvo, mirando con diversión el espectáculo que Úrsula estaba ocasionando a fuera de la mansión.

Los paparazzi no tardan en vender esta nota, tan exclusiva... "La esposa de Antonio Chop; en la puerta de la mansión Wlod, rogando hablar con Santiago, su ex amante"...

Será un escándalo que no solo va a tener entretenida a Úrsula por toda la noche, sino por mucho más tiempo.

__ Te equivocas, señora Úrsula, o prefiere que le llame, señora Chop..._ Mencionó Marcos, en el momento en que se acercó a Úrsula, y a los dos guardias.

Úrsula puso toda su atención en Marcos que se iba acercando a ella.

__ Quiero hablar con Santiago, no con un sirviente cómo lo eres tú, Marcos... _ Úrsula estaba furiosa de ver a Marcos, en lugar de Santiago.

_ Qué no te alegras de verme, porque yo sí. Todavía recuerdo la manera en que intentaste seducirme en más de una ocasión..._ Dijo Marcos, deseando ver la cara de Úrsula.

_ ¿Ya lo has olvidado?... _ Marcos, deseaba provocar a Úrsula lo más que se pudiera.

Úrsula recordó todas las veces qué intento seducir a Marcos, para poder ganarle una a puesta millonaria a una de sus amigas.

__ No eres nadie, para una mujer cómo yo. No quieras sentirte superior a cualquier otro sirviente, porque yo intente ponerte a mi altura._ Mencionó Úrsula desafiando a Marcos.

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