A veces de golpe la vida te sacude y tú no sabes qué pasó con todo tu mundo, eso me acaba de pasar no diría que me sacudió la vida más bien recibí una clase de vuelo sin paracaídas. Era un día tan normal, el trabajo de siempre, la gente de siempre, el aburrimiento de siempre... En fin nada fuera de lugar, hasta que:
-Dalia el jefe dice que subas con los planos del edificio y quiere además que estén incluidos los cambios eléctricos, teniendo en cuenta el nuevo presupuesto?
- Ok, en qué piso se encuentra?
- en el noveno.
Y ahí estaba yo en el ascensor subiendo al noveno infierno, recibiendo mi primera y última clase de vuelo...
Ahora estoy aturdida en medio de una cena con comida de sospechoso aspecto, creo que en mi plato algo se mueve. Eso que escurre entre las manos de ese señor es salsa o sangre, puag qué asco mi Dios, que sea salsa, sí tiene que ser salsa por mi salud mental; pero y esta gente quién es? Vestidos con ropas de museo, y ese olor por Cristo que no se bañan. No soy ingenua sé que no estoy soñando, cómo acabé aquí solo el Altísimo sabrá.
Ah lo primero es saber dónde estoy? Seguro me morí con la caída del ascensor, pero esto no tiene pinta de ser el cielo, será el infierno?, na no creo, esto es tan frustrante...
- Sol, Sol, Soledad del Alba
- Ah, que bruto, y tú quién eres, por qué gritas?, mis pobres oídos y por qué me das un codazo, mínimo otro y me fracturas una costilla y quién es esa Soledad de Alba.
- Sol te sientes bien?
- Sol, quién yo? Claro yo Sol sí, sí claro. - miro hacia todos lados y sólo veo ojos asombrados - Yo creo que estoy algo desubicada, saben qué, me siento fatal puedo retirarme a donde sea que me tengo que retirar y todo eso ya saben ja ja...
Hay madre creo que ya lo empeoré, mejor me levanto de esta mesa y recurro al teatro, dos pasos y a caer como costal, quien quita y así me salvo de morir por intoxicación alimenticia.
Finjo que me desmayo, total que no es tan difícil si consideramos que me morí hace poco y he venido a parar a este indescriptible lugar. Siento que soy alzada, el mal olor inunda mis fosas nasales quemando mis pulmones en el proceso, ahora sí y me desmayo de verdad, me tendré que bañar con lejía lo menos, eso debe pegarse, asco, asco, asco...
Me llevan en brazos muy aromatizados a algún lugar, no abro los ojos y casi ni me atrevo a respirar. Sublime sacrificio, en ello presiento me puede ir la vida. Al fin me depositan en una cama creo, y a poco llega un médico.
- Doctor qué tiene Sol?
- Marqués Del Alba ahora la examino, pero fuera de ayuda saber qué sucedió?
- Estábamos cenando cuando notamos que Sol no había probado su comida. Le llamé varias veces, pero parecía no escucharme.
- Fue entonces que yo le di un codazo para que respondiera a padre, pero Sol me miró como si no me conociera dijo cosas raras.
- Sí Doctor, mi niña era como si no supiera quién es y luego se desmayó. Qué tiene mi niña?
- Calma Marquesa ahora mismo la examino.
Mientras esas personas hablan yo me iba sumergido cada vez más en una verdadera inconsciencia.
Había pasado una semana y ya sabía exactamente dónde estaba y cuál era mi identidad. La noche que llegué a la mitad de la cena y después de mi fingido desmayo, caí verdaderamente en un estado de inconsciencia que duró dos días, en los que algo me reseteó el Windows y como si de un ordenador se tratase mi cerebro comenzó a descargar recuerdos del cuerpo que hábito.
Soledad del Alba actualmente tiene quince años. Es hija, bueno no rectifico, soy hija de los marqueses Del Alba, no tenemos gran estatus, pero, en cambio, son una familia muy unida; compuesta por mi padre Saúl, mi madre Sonia y mi hermano Saulo. ¿Nada que aquí eso de empezar los nombres con S es tradición o qué?
En fin sin alargar la cosa estoy en una novela en línea, clasificada como romántica y haciendo honor a la verdad me gustó muchísimo. Ahora, sin embargo, no estoy tan segura de ello. En la novela no te explican que no hay electricidad, la comida está medio viva en el plato, el sanitario es creativo por describirlo de alguna manera y no hablemos de la ducha, eso ni existe, te bañas en una especie de tina y sin jabón, no hay maquinillas de afeitar, ni champú y no sigo porque lloro.
En esencia tengo suerte, pues he transmigrado antes del inicio de la trama, me quedan casi dos meses para que al marquesado llegue el protagonista masculino y comience mi insana obsesión por él. En la novela Rafael sucesor del Ducado Costa Rivera, llega con su padre el Duque por cuestiones de negocios, pues en un golpe de suerte mi hermano en compañía de mi padre habían encontrado una cueva con Rodocrositas, ese mineral poco abundante con un característico color rosa rojizo.
Este mineral es muy codiciado pues suele ser utilizado por su potencial para aliviar heridas emocionales y tensión mental. La familia del Duque financiaban un lucrativo negocio farmacéutico, por lo que este hallazgo en particular les llamó la atención y concertaron un contrato exclusivo con el marquesado. Para ultimar los detalles con respecto a la extracción y traslado del preciado mineral es que el Duque venía y con él traía a su hijo como parte de su entrenamiento de sucesor. Y aquí es donde entro yo. Sol la desequilibrada obsesa según la novela.
Soledad es una chica muy hermosa y tonta que ha sido educada para pescar un buen marido que le ayude a subir de estatus, hasta ahí todo bien, en definitiva todas las jóvenes en esa sociedad tenían similar situación; pero su problema fue no entender que ya el joven tenía prometida y que se amaban además.
En su obsesión esta chica droga a Rafael y logra embarazarse, haciendo que el compromiso de los protagonistas se rompa y obliga al joven a desposarla. No conforme con esto hace que destierren a la protagonista y consigue que su familia la case con un señor muy viejo. Tratando de que su forzado esposo la atienda le cae detrás por los pasillos y se le enreda el bajo del vestido rodando por las escaleras perdiendo así la vida ella y su bebé nonato. Fue un final que disfrute para la villana. Ahora bien, en este pellejo ya no me parece apropiado que yo termine de esa manera. Total al final el señor viejo nunca tocó a la protagonista femenina ni con el pensamiento, en cambio, le dejó una enorme fortuna y le hizo el favor de morirse rapidito, quedando como una riquísima joven viuda lista para volver a los brazos de su querido amor y sí vivieron felices para siempre.
Sabía por la novela que mi hermano Saulo ingresó a una academia llamada Delta Adhara. Prestigiosa institución para nobles de ambos sexos. La misma era una sociedad de eruditos organizada para el avance del arte, la ciencia, la literatura, la música o cualquier área cultural o intelectual. Los nobles aunque no estaban obligados, enviaban a sus hijos a dicha academia, para elevar el orgullo de sus familias y aunque la Soledad original tuvo la oportunidad de ir, declinó la misma, pero como ya dije esa era la otra Soledad porque lo que es esta, se va de cabeza y todo a esa escuela y que los protagonistas nunca sepan ni de mi existencia, me parece más que genial.
La familia Del Alba quedó asombrada con la decisión de mi inscripción a la academia Delta Adhara, pues hasta ese momento a Sol lo único que le interesaba era casarse. En menos de medio mes ya los preparativos estaban listos y mi hermano Saulo y yo partiamos a lo desconocido dos semanas antes de la llegada de Rafael y su padre a nuestro marquesado. El entusiasmo me desbordaba, estaba radiante de alegría acababa de dar mi primer paso para salirme de la trama. Ya podía llegar el Protagonista a mi casa que yo nunca lo vería ni él a mí, pues la academia era por tres años y aunque se podía regresar por navidad y el verano ya buscaría yo la forma de no cruzarme en su camino.
Una semana después ya no estaba tan feliz, para llegar a la academia había que viajar por dos semanas enteras metidas en esa detestable ratonera para humanos que llamaban carroza. Me dolía hasta donde no sabía que tenía huesos. Mi trasero se iba a quedar plano con tanto bache, qué esta gente no sabe hacer carreteras decentes? Y por Dios como extraño los coches, hasta el transporte público es mejor que esto!
Hemos tenido que acampar en el medio de la nada en dos ocasiones. Lo único bueno es que me he hecho dueña de la cocina. Ya nadie discute conmigo por eso. El primer día que acampamos los soldados del marquesado me entregaron un cuenco con algo entre crudo y quemado que pretendía ser comida, ni de juego lo intenté ingerir me comí unas frutas y eso fue todo, pero a partir de ahí me hice cargo y ya esperan con ansias mis alimentos. No es mucho lo que se puede lograr en estas circunstancias, pero es aceptable, hasta mi hermano está asombrado, y bromea conmigo diciendo que ya soy material para ser una excelente esposa. Hombres que se puede esperar. Mi mamá, la de la otra vida, decía que a los hombres se les conquista por el estómago y creo que tenía razón.
Según mi hermano ya queda poco menos de dos días para llegar a la Academia eso me ha subido el ánimo, pues intenté montar hace unos días en caballo, para no tener que sentirme como un bistec machucado en la carroza, pero el remedio fue peor que la enfermedad, ni les explico qué me duele ahora, solo baste decir que es un lugar donde la espalda pierde el nombre.
Download MangaToon APP on App Store and Google Play