Hola chicas les doy la bienvenida a otra nueva historia, esperando que sea de su total agrado. Siempre leo todos los mensajes, tanto buenos, como malos.

Les aclaró todas las obras que he publicado, están totalmente terminadas excepto las que solo tendrán segunda parte. "Salvaje Indomable" y un "contrato que cambio mi vida para siempre"

He leído comentarios que dicen está autora no termina sus obras y cosas así. O si no les gusta lo que escribo solo abandonan la lectura y no dejen un mal comentario.

Ahora si le doy la bienvenida. Comencemos.

Soy Andrew Quintana, soy dueño de varias empresas dentro y fuera del país. Mis empresas consisten en bienes y raíces. "Compra y venta de terrenos"

Para luego construir casas residenciales, departamentos de lujo. O simplemente darles una buena vista y venderlos, aún muy buen precio.

Es un buen negocio, no me puedo quejar, pero mi verdadero negocio, es el narcotráfico.

"En pocas palabras soy un mafioso". No tengo padres, ni sé quienes fueron, crecí en un orfanato, con mi amigo y casi hermano Luis Ortega. Soñábamos con ser adoptados, por una gran familia y tener lo que muchos niños tienen.

El calor de un hogar y el amor de unos padres, pero nunca fuimos adoptados, crecimos y la edad de diez años por fin una familia me adoptó, que decían ser personas de bien.

Pero más bien eran unos explotadores de niños, no solo yo había sido adoptado. Si no tenían a otros niños en total éramos seis, que nos obligaban a salir a las calles a vender drogas, y si no obedecíamos éramos cruelmente castigados.

Así fue como comencé en ese bajo mundo. No paso mucho tiempo y me escape con los otros niños que estaban ahí, una noche regrese al orfanato para sacar de ahí a mi amigo Luis, él es dos años más chico que yo.

Y así comencé mi vida en él bajo mundo de las drogas siendo un niño. Luis y los cinco niños y yo formamos nuestra propia banda.

 Fuimos creciendo y nos fuimos apoderando de las calles, hasta llegar a controlar todo un barrió, a pesar de mi corta edad, aparentaba tener más años, pues era el más alto entre todos ellos, así que me convertí en el jefe de la banda.

Como no pensaba quedarme siendo un ignorante decidí estudiar, por las mañanas era el joven bien portado, estudioso, tenía un trabajo de medio tiempo, para guardar las apariencias.

Por la noches era el chico malo, que movía casi media ciudad.

A través de los años, todo el que me estorbaba lo fui eliminando, infiltrando a mi gente, entre las mafias ganando terreno en los carteles más peligrosos hasta que me convertí en el jefe.

No tengo ninguna piedad con mis enemigos, muchos temen meterse en mis territorios donde yo estoy al mando, prefieren unirse a mí antes de declararme la guerra.

Tengo muchos problemas con algunos cárteles, me quieren sacar de la jugada. "Hasta le han puesto precio a mi cabeza" Pero no creo que allá una sola persona que quiera meterse conmigo. No por algo me apodan Quintana el diablo.

Estoy en mi mansión, anoche me fui de fiesta con Luis y otros amigos a celebrar que logramos sacar de la jugada a uno que nos estaba estorbando en el negocio me pase de copas, no soy de tomar mucho, para todo tengo mis límites.

Me despierto y a mí lado está Amanda mi amante, es la única que ha podido entrar y salir de mi casa a la hora que ella quiere.

Ella sabe de sobras que no la quiero que lo nuestro solo es sexo, no la quiero no siento nada por ella.

Jamás me he enamorado de nadie y no pienso hacerlo, he visto a mucho de mis compañeros llorar por el amor de una mujer. Uno de mis amigos se quitó la vida cuando supo que su mujer lo engaño.

No, yo no voy a caer en ese juego. "Jamás me voy a enamorar de nadie"

De sobras sé que ella está conmigo por mí, dinero, es lo que todas las mujeres buscan. "Dinero"

Y a ella se lo doy a mano llenas. No soy fácil de engañar, conozco las mujeres como ella, son capases de venderle su alma al diablo por unas cuantas monedas.

Ya te vas amor, quédate otro rato conmigo.

Si tengo que ir a la empresa, tengo varios asuntos pendientes que debo resolver. Pero ella me abraza se aferra a mí para que no me levanté. Suéltame Amanda, si quieres seguir durmiendo has lo tu sola.

Como no logra que yo me quede con la en la cama se molesta. Sabes que eres un idiota Andrew.

Si ya lo sé, y tú eres una loca desquiciada, será mejor que cuando regrese te ayas ido. Le digo molesto, me enoja cuando se pone de impertinente.

Amanda lleva más de cinco años con Andrew, tratando de conseguir que él se case con ella, como es la única mujer que ha llevado a su mansión ya se siente dueña y señora entra y sale a la hora que ella quiere.

Estoy enojada con Andrew, ya lleva más de tres meses que no me toca, y cada vez que intento estar con él, me rechaza ni porque anoche estaba algo pasado de copas quiso hacer el amor conmigo.

La verdad no lo quiero, solo estoy con él por su dinero, él me da todo lo que le pido. No es más que un estúpido, y eso que es el gran jefe.

Cuando salí de ducharme, Amanda estaba parada frente a la puerta del baño totalmente desnuda, estaba esperando que yo saliera.

Se abalanza sobre mí y me comienza a besar, por un momento me siento tentado por sus caricias, pero después de unos segundos la rechazó. Déjame en paz Amanda no tengo tiempo para tus tonterías de jueguitos.

A lo que ella me responde enojada. Que demonios pasa contigo Andrew, ahora ya ni si quiera hacemos el amor.

Simplemente no quiero, eso es todo.

Llevas meses sin tocarme. ¿Tienes otra verdad? Me enojo y la saco de la habitación, así como estaba desnuda, comienza a grita golpeando la puerta. Maldito me la vas a pagar.

No le tomo importancia a sus palabras la verdad ya me tiene harto, no niego que tiene bonito cuerpo y me complace en mis necesidades. Pero no se que pasa conmigo últimamente que no quiero nada con ella, ni con otras mujeres. No se a que se deba, Luis se burla de mi, me dice que ya estoy viejo

Estoy terminado de vestirme cuando suena mi teléfono. Si Luis, que pasó.

Tienes que venir a la empresa, tenemos un problema.

De que se trata.

Tenemos problemas con uno de los terrenos que compramos.

Trata de arreglarlo. Eso me molesta cuando surgen esos problemas, porque normalmente es que el cliente quiere sacar provecho, pidiendo más de lo acordado.

Salgo de mi habitación, afuera está Amanda que al verme trata de darme una bofetada, le sujetó la mano y la estrello contra la pared, no me gusta que nadie se atreva a tocarme, que no pague con su vida.

No te atrevas a querer volver a tocarme, porque la próxima vez te cortaré la mano y se la daré a mis perros para que se la coman. Me entiendes.

La veo que está a punto de llorar, pero no me importa, ella sabía las condiciones a mí no me puede exigir nada.

Después salgo en compañía de mis hombres, pues nunca estoy solo. Nunca se sabe cuando el enemigo puede dar una sorpresa.

"Por otro lado muy lejos de ahí"/

Soy alondra, una chica pelirroja. Tengo veintitrés años, tengo buen cuerpo, un color de ojos impresionantes, "verde olivo" Lo único que no me gusta es que tengo algunas pecas en mi rostro.

Tengo una hermana "Itzel" Dos años menor que yo, ella es muy diferente a mí, dicen que no parecemos que seamos hermanas.

Mi madre una mujer dedicada todo el tiempo, al hogar a tiempo completo, al cuidado de la casa.

Vivimos a las a fuera del pueblo, porque mi padre tiene una pequeña finca, por así decirlo. Mi padre es agricultor. O más bien como muchos nos dicen campesinos porque mi padre sé dedica a las siembras, y pues como no tiene quien lo ayude en la cosecha, pues mi hermana y yo somos las que lo ayudamos.

Después todo lo que cosechamos lo llevamos al pueblo, donde tenemos un puesto de frutas y verduras en el mercado, todo lo que vendemos es cosechado por nosotras mismas. - Todo es fresco recién cortado -

Tenemos un carro, que esta creo que más viejo que yo, el condenado. A cada rato se descompone y nos anda dejando tiradas, así que la necesidad me llevó aprender un poco de mecánica, cuando eres pobre y tienes todo tipo de necesidades, pues no queda de otra, hay que aprender lo que sea.

Una mañana como todos los días, mi hermana y yo nos dirgiamos al pueblo para ir a verde nuestro productos como todos los días.

Fuimos emboscadas por unos hombres armados, para colmo el maldito carro viejo, se le ocurrió descomponerse y dejarnos tiradas. Mi hermana logró escapar, adentrándose en los montes, pero a mí me atraparon porque me caí. Y todo porque a mí esa mañana se me ocurrió ponerme zapatillas. "En mi vida vuelvo a usar tacones altos"

Fui secuestrada por esos hombre, vendida como si fuera animal en canal. Ahora estoy aquí en cerrada en estas cuatro paredes, no hay ventanas, solo una puerta que es la entrada y la salida.

Ya he intentado escaparme varias veces, haciéndome pasar por la enferma, pero me han atrapado, está última vez, me golpearon demasiado fuerte, y me pusieron unos fierros en los pies, que casi no me dejan caminar, porque ya me lastimaron.

No sé donde estoy, ni cuanto tiempo a pasado, solo escucho que entran y salen carros o camiones, gentes que hablan, pero no puedo entender lo que dicen por el ruido que hay.

Varias veces me han dejado todo el día sin comer, he bajado mucho de peso. Siento que ya no tengo más fuerzas para continuar viviendo.

Solo pido que ocurra un milagro, que me permita volver a ver a mis padres y saber de mi hermana si está bien. O también la secuestraron.

Cuando llegue a mi oficina, Luis estaba hablando con dos hombres los cuales habíamos hecho negocios con ellos, en la compra de unos terrenos.

Después de un rato de estar discutiendo con ellos. Porque querían que les pagará un poco más por los terrenos, como no me gusta estar discutiendo con ancianos, decidí pagarles un poco más de lo acordado.

Después me quede en mí oficina, tenía algún pendiente que atender. Cuando entro Luis.

Soy Luis Ortega, conozco a Andrew desde que éramos niños, crecimos juntos en el orfanato yo nunca fui adoptado, a Andrew si lo adoptaron cuando ya tenía como diez años.

Después de un tiempo una noche, él fue por mí, y me saco de ahí. Desde entonces estamos juntos.

Él es como mi hermano, bueno así lo veo yo, él es algo especial tiene mal carácter. Bueno como es él jefe. Pienso que a eso se debe. Siempre lo molesto que su mal carácter se debe a que nunca se ha enamorado.

Mi hermano ya ni te pregunte. ¿Cómo estás? Después de la pasada de copas que te diste anoche.

Solo lo veo de reojo y sigo revisando unos documentos. Mejor ni me preguntes todavía tengo dolor de cabeza, mas con esos viejos fastidiosos.

Pues como no, si bebiste como nunca. Solo Amanda que te aguanta.

De esa ni me hables, cada vez está más insoportable.

Solo veo que Luis sé comienza a reír. Ja ja ja. Te lo dije mi hermano cuando te enredaste con ella, pero no me hiciste caso.

Piensa que no sé que está conmigo por mi dinero, se ha creído tanto ese cuento de que ella es la mujer perfecta. Si lo es, pero para gastar mi dinero manos llenas.

Mira mi hermano, porque tu se lo permites. Si ya sientes que es un problema deberías de hablar con ella y sacarla de tú casa antes qué sea demasiado tarde. Y tú tienes la culpa, ¿por que terminas con ella? y después vuelves con ella.

Que tal que un día encuentras al amor de tu vida. Cuando le dije Andrew así, solo me quedó viendo con odio el no cree en amor, ni que un día, encontrará a la sea el amor de su vida.

Cállate la boca, ni en broma digas eso. O quieres que te corte la legua por hocicón.

Pero mi hermano ya no eres un niño, tienes treinta y cinco años, ya es hora que te cases y que formes una familia. O te piensas quedar con Amanda.

Pero tú estás loco, ella seria en la última mujer que yo pensará. Porque no te casa tú y dejas de decir tanta estupidez.

Luis sí que sabe hacerme enojar con sus estupideces que dice. . Ja ja ja. No mi hermano yo todavía no he encontrado a la mujer de mis sueños. Solo me le quede viendo a Luis, que facilidad dice tantas tonterías, a veces pienso que está un poco loco. Mejor vamos a comer, tengo algo de hambre.

Vaya pensé que nunca lo dirías.

Salimos de la empresa nos dirigimos al restaurante. Soy algo exigente en lo que sé refiere a la comida, no me gusta comer cualquier cosa, así que siempre elijo lo mejor, no me importa gastar una fortuna en comida y bebidas.

Ahí estuvimos un buen rato, nos, estábamos tomando varias copas, hasta que Luis recibe una llamada, que había problemas con la perdida de un embarque.

Así que nos fuimos a una de las casas que tengo a las a fuera de la ciudad, ahí es donde llevo acabó todas mis operaciones, reuní toda mi gente, también se reunieron algunos de mis socios, por así decirlo que también les habían robado gran parte de su mercancía.

Tengo gente vigilando por todos lados,así que no tardarían en darme información, en un par de horas más tarde tengo la información que estaba esperando. Sabia que era ese maldito colombiano. El que nos,a estado robando nuestra mercancía. Tienes la ubicación Luis.

Tal parece que se oculta en un pequeño pueblo.

Pues prepárense que salimos de inmediato para allá, quiero que lleven todo el armamento que sea necesario. Quiero mi merca de vuelta, después volaremos en mil pedazos ese maldito pueblo, junto con él perro lo quiero bien muerto

Al escuchar decir a Andrew lo que piensa hacer, tuve que intervenir. Pero Andrew, no puedes hacer eso, es un pueblo puede haber niños, mujeres. Él solo me quedo viendo de reojo serio sin responder, después de un rato dijo. Está bien, saquen a las mujeres y a los niños. Pero los hombres no, esos son cómplices de ese maldito.

Cuando Andrew da una orden, nadie se atreve a contradecirlo, solo yo que le tengo que hacer ver las cosas, así que trato de hacer las cosas como él me las ordena, pero donde hay mujeres o niños no puedo hacer lo que él dice. Ahí si no estoy de cuerdo.

Por la tarde estábamos listos para salir, rumbo a ese lugar, Andrew se fue en otro de sus jet privados. Yo me fui en otro con toda la gente íbamos armados hasta los, diente por así decir,

Cuando llegamos era casi de madrugada, así era mejor, pues así no se darían cuenta de nuestra llegada, los agarraríamos desprevenidos.

Toda nuestra gente ya sabían lo que tenía que hacer, en primer lugar era ubica donde tenían los cargamentos de drogas que no habían robado ese cabrón, después sacar a todo las mujeres y a los niños y por último dinamitaríamos todo el pueblo para volarlo en pedazos pues esas eran la ordenes de Andrew. Que no quedará nadie vivo.

Cuando Andrew llegó ya habíamos recuperado la mercancía, nuestros hombres estaban sacando a las mujeres y a los niños cuando alguien nos delató, y fuimos descubiertos por la gente del colombiano, y se arma tremenda balacera.

Estuvimos por más de una hora de enfrentamiento con la gente del colombiano y la nuestra, tuvimos varios heridos de nuestra gente.

Hasta que nos avisaron que se nos estaba escapando nuestro hombre, enseguida Andrew dijo que se lo dejáramos que él se haría cargo. Yo me hago cargo de ese perro.

Me encargué de ir detrás del colombiano, esto era algo entre él y yo, mientras lo perseguía, cuando de pronto vi que abrieron una de las puertas de la camioneta en la que iba ese cabrón, y algo salió de la camioneta que hizo que yo me detuviera de golpe.

Para no pasar atropellando lo que había visto.

Sin pensarlo en ese momento que fuera alguna trampa, me baje de inmediato, cuando me acerque vi que era una mujer pelirroja, tenía algunos raspones tal vez por la caída. No lo pensé dos veces y la subí al auto para continuar con la persecución.

Pero ya era demasiado tarde, se me había escapado maldije una y otra vez, pues había cometido un error.

Cuando regrese a donde se encontraba Luis, estaba más que furioso, por la estupidez que había cometido, de dejar escapar a ese desgraciado. De puro coraje comencé a volar el pueblo en pedazos, que no quedaran ni las cucarachas vivas.

Cuando le dije a Luis lo ocurrido este se echo a reír como un condenado loco. No lo puedo creer mi hermano tú salvando a una mujer, no pensaré que podía ser una trampa de ese hombre.

No lo pensé.

¿Dónde está? Quiero ver a la culpable por la cual dejaste escapar el colombiano

Está en auto, revisa la, si no está muerta.

Enseguida fui al auto, donde estaba esa mujer, cuando la vi tenía varios raspones, imagino que por la caída que llevo.

Mientras la revisaba vi que tenía moretones en los brazos y tenía unos grilletes en los pies, tal parecía que estaba como prisionera. Vaya una pelirroja, pero su pulso es muy débil.

De inmediato regresé con Andrew. Tu pelirroja está con vida, pero su pulso es débil, viste que tiene unos grilles en los pies.

¿No?, no me di cuenta.

Y que hago con esa chica, te la llevas o me la llevo yo.

A esa me la llevo yo. Después me fui de ese lugar, me llevé conmigo a esa chica pelirroja, si era propiedad del colombiano seguro que después querría recuperarla así que la tendría como rehén.