El Mismo Rostro, Dos Caminos Distintos

Punto de vista, Alex...

Me desperté un poco mareado, me dolía la cabeza, anoche en mi último trago alguien debió de haber puesto algo, me comporté como un imbécil sin control.

Abrí mis ojos con fastidio, comencé a levantarme de la cama, y mientras lo hacía me di cuenta de algunas manchas de sangre y la ropa interior de aquella chica, rotas al costado de la cama.

Comencé a recordar un poco lo que había pasado, y lo que yo le dije luego de terminar y de verdad queria golpearme por imbécil.

Me senté en la cama, intentando entender, ¿Que ocurrió anoche?, ¿Cómo podría ver a Adriana a la cara después de esto?, volteó a ver a la chica, ella se veía tan inocente, definitivamente no era todo lo que los amigos de Adriana habían contado, no era lo que Adriana me había contado, está chica era virgen, no como dijeron sus amigos.

Le acaricié un poco el rostro, su cabello aunque un poco descuidado era suave, le di un pequeño beso en la frente, luego me levanté, debía ir a darme una ducha, luego vestirme y comenzar a trabajar.

Debido a mis problemas de salud mental, no me gustaba salir de casa ni estar rodeado de desconocidos.

Salí de la habitación luego de haberme arreglado, baje a la cocina, ahí estaba Mossy como siempre trabajando en mi desayuno.

Le dije un poco feliz - Buenos días - Mientras me sentaba en una de las sillas del mesón de la cocina.

Ella se volteo y me dió una gran sonrisa, para luego decir - Hola mi pequeño, buenos días, ¿como pasaste tu primera noche de recién casados?, se te nota un poco contento -

Le di una sonrisa sincera, mientras un poco de rubor contornea mis mejillas, le dije - Si, me siento un poco feliz, anoche fue una gran noche, aunque no recuerdo mucho, pero si se que fue una gran noche -

Ella me mira un poco extrañada, luego pregunta - Como que no recuerdas mucho? -

Di un gran suspiro, para luego contarle - Alguien coloco alguna droga en mi bebida, esto hizo que tuviera intimidad con mi esposa, cosa de la cual me arrepiento de cierta manera porque se que pronto nos vamos a divorciar y la chica era virgen -

Ella me mira un poco molesta, luego me reclama - Que desagradable y malagradecido eres, ella es una buena chica, le agrado muchísimo a tu madre, y sabes que tu madre sufre de los mismos trastornos de selectividad que sufres tu, pero está chica se ganó a ti madre y luego de haber Sido su primer hombre, te atreves a abandonarla, tu padre estaría sumamente molesto de escuchar eso -

Tragué saliva, luego intenté responderle de manera amable - Yo no amo a esa chica, será lo mejor para ella que yo salga de su vida, a quien amo realmente es a su hermana -

Ella dice de manera sarcástica y perspicaz - Enserio crees que esa mujer te perdonará que te hallas acostado con su hermana?, o mejor dicho, enserio crees que esa tal Adriana te ama?, si te amara se habría escapado contigo el mismo día en que fuiste a casa de sus padres a pedir su mano en matrimonio -

Intenté que esas palabras no me dolieran pero si, si dolió, la verdad ella tenía la razón, Adriana nunca quiso huir conmigo del yugo de su padre.

Me fui al comedor en silencio a esperar que me sirvieran el desayuno, mientras llegaba Mossy espere a que Abril bajara a comer conmigo, pero no, ella no bajo, ni siquiera se molestó en despertar a tiempo para venir a comer conmigo, soy su esposo, debería de ser un poco más considerada.

Espere por una hora, y me comí el desayuno molesto porque estaba frío, salí directo a mi oficina a trabajar, trabajo desde mi casa, detesto tener que salir.

No tengo muchos amigos, no suelo viajar y disfruto de pasar mi tiempo solo y sin que nadie me interrumpa o moleste.