Soy Marcela y jamás creí que algo así me sucedería a mí. fui víctima de traición entre mi novio y mi hermana, lo que me llevó a refugiarme en el alcohol y acostandome con quién menos pensé... mi vida dio un giro inesperado en menos de lo que se espera... Ven y se parte de mí historia...
NovelToon tiene autorización de KeliindA RojanO C. para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Confrontación
Todas las señales que había ignore, los detalles que había empujado al fondo de mi memoria, resurgieron con una claridad desagradable.
Lina.
La forma en que me insistió beber la noche anterior, la insistencia con la que prácticamente me había metido aquel líquido asqueroso en la boca.
Todo había sido ella.
Sentí que mi respiración se detenía.
—Eres tú— susurré, sin poder creerlo.
Lina continuó su Arrebato sin darse cuenta de que yo la estaba viendo con nuevos ojos.
—Te amaba, te protegía—gritó, agitando frenéticamente las manos para enfatizar lo mucho que Elijah me querían.
Y fue entonces cuando lo vi.
El reloj de pulsera.
El mismo que había visto en la muñeca de la chica con la que Elijah me había engañado.
El mismo que Lina había asegurado haber tirado.
Ahora brillaba con descargo en la muñeca de ella.
Sentí una punzada helada recorrerme el cuerpo.
Ahora me daba cuenta de que Lina había estado detrás de todo.
La traición me golpeó con fuerza, dejándome anonadada.
—¿Cómo pudiste hacerme esto?— pregunto Elijah, fingiendo dolor.
Lo miré, aún aturdida.
—¿Hacer que?—susurre, incapaz de procesar lo que estaba sucediendo.
Todo mi mundo se estaba derrumbando de nuevo.
Primero Elijah. Y ahora Lina.
Un solo día había sido suficiente para destruir todo lo que conocía.
No podría comprender cómo mi vida podía torcerse de una manera tan brutal en un solo día. ¿Qué he hecho para merecer un destino tan cruel? Las lágrimas nublan mi visión mientras el peso de la traición oprimía mi pecho.
Elijah y Lina, dos personas en quién había confiado mi vida, ahora la estaban destruyendo sin piedad. Y Como si eso no fuera suficiente, ahora debía afrontar el hecho de que había entregado mi virginidad a un completo desconocido.
—¡Miren!— gritó Lina con una sonrisa malévola mientras me señalaba. —Está llorando porque la han descubierto en su mentira—
Quise protestar, pero las palabras se me ahogaron en la garganta. Solo podía llorar, incapaz de encontrar una defensa ante la mirada burlona de la multitud.
—Ella— Elijah comenzó a hablar, pero un fuerte estallido lo interrumpió.
Leandro salió de la habitación 601, cerrando la puerta de un portazo. El golpe resonó en el pasillo y todas las miradas se dirigieron hacia él. Me di cuenta, con un sobresalto, pues había subestimado lo imponente que era. Su altura superaba a la de todos en el lugar, y su sola presencia irradiaba una autoridad que acalló de inmediato con los murmullos. Sus ojos fríos recorrieron a la multitud antes de fijarse en Lina.
—¿Cuál es el problema?—su voz sonaba más grave y carrasposa que cortó el silencio mientras se apoyaba contra la puerta, sosteniendo una copa de whisky. —No dejan dormir—
—¡Es esta perra!— grito Lina, señalándome. —Engaño a su novio—
Leandro dirigió su mirada hacia mí, estudiándome como si fuera la primera vez que me veía.
—¿Y qué te hace pensar eso?—preguntó con calma, sin apartar los ojos de mí.
Lina frunció el ceño, confundida.
—¿Qué?—
Leandro se erguió, con su sola presencia dominando aún más la escena.
—Llegaste aquí, gritando que esta chica guapa engañó a su novio, como si la hubieras atrapado en la cama con otro hombre—
Sentí el calor subir a mi rostro cuando él me llamó guapa. Había escuchado ese cumplido antes, pero por alguna razón, la forma en que Leandro lo dijo provocó un estremecimiento en mi interior. Provocando que mi mente se llenara de imágenes de la noche anterior, haciendo que mi piel se erizara.
La multitud murmuró en señal de acuerdo y se volvió hacia Lina y Elijah, esperando una explicación.
—¿No lo ven?— insistió Elijah, elevando la voz. —Tiene el pelo revuelto y los ojos hinchados—
—Anoche fue una locura— intervino Leandro con tono desenfadado, pero su voz gruesa eclipsó la de Elijah. —Todo el mundo celebraba el compromiso de Camilo y Ana. Había bebidas gratis por todas partes. Es normal que la mayoría tenga resaca y que esta chica luzca así, con los ojos cansados y el cabello despeinado—
Lina y Elijah intercambiaron miradas nerviosas. La multitud empezaba a inclinarse en mi favor y su plan comenzaba a desmoronarse.
—No ves que ella...—Lina intentó defenderse, pero su voz tembló.
Leandro la interrumpió con una sonrisa ladina, el tipo de sonrisa que haría estremecer a cualquiera.
—¿Y quién eres, por cierto?—
—¿Qué?—
—Solo soy un huésped de este hotel, cuyo sueño ha sido interrumpido por tus gritos y acusaciones sin pruebas—su voz se alzó lo suficiente para que todos lo escucharan. —Lo mínimo que puedes hacer por todos nosotros es esclarecer el asunto—
La multitud asintió de acuerdo.
Furioso, Elijah avanzó hacia Leandro. Su tamaño era considerable, pero incluso él parecía insignificante En comparación con el alfa.
—Aléjate de esto— gruñó Elijah, liberando su poder lobuno. —No es tu problema—
Pero Leandro no se inmutó.
—Lo es—su respuesta llegó con un gruñido profundo.
El poder que emanó de él era tan abrumador que Elijah tuvo que apartar la mirada, mientras la multitud, instintivamente dio un paso atrás.
Lo miré asombrada. Apenas podía creer que había pasado la noche con un hombre tan poderoso.
Leandro fijó su mirada en Lina, quién retrocedió ligeramente al sentirse expuesta.
—Supongo que eres su hermana—dijo con calma, aunque su tono tenía un filo peligroso. ¿Por qué estás tan ansiosa por acusarla de engañar a su novio? Incluso si él es paranoico y cree que su novia le es infiel. ¿No deberías defenderla y demostrar que está equivocado? En cambio, eres tú quien incita la acusación.
Lina abrió la boca, pero no encontró respuesta. Leandro desvió la mirada hacia Elijah con desdén.
—Ambos parecen muy seguros de que ella lo engañó cuando ni siquiera han estado en su habitación—
Se giró hacia mí y me extendió su mano.
—Dame tu tarjeta de acceso—
Todavía temblorosa, obedecí sin cuestionarlo. Leandro tomó la tarjeta y la levantó para que la multitud la viera.
—Miren aquí— anunció con voz fuerte. —Su tarjeta de acceso dice, 610 y ni siquiera ha llegado todavía—
Un murmullo recorrió a la multitud mientras las miradas se desviaban hacia la habitación 610. Frente a la puerta, un hombre gordo y mayor, vestido apenas con un albornoz mal ajustado, observaba la escena con evidente incomodidad.
Leandro emboso una sonrisa burlona.
—Me pregunto qué estará haciendo este anciano en la habitación de una joven que ni siquiera ha entrado. A menos que ciertas personas hayan conspirado para atenderle una trampa—
El hombre, sintiendo que todo se desmoronaba, decidió salvarse a sí mismo sacrificando a Lina.
—¡Es todo culpa suya!—gritó con una voz ronca, señalando a Lina cuyo rostro había perdido todo el color. —Ella planeó todo, se suponía que debía traerme a la chica hasta aquí. ¡Yo pagué la mitad de la tarifa y no cumplió su parte del trato!—
Leandro arqueó una ceja y se cruzó de brazos.
—Lina, ¿De qué está hablando?—
—¡Eso es una tontería!— grito Elijah, pero su furia solo lo delató.
Sin pensarlo dos veces, se lanzó contra el anciano y lo empujó a un lado antes de abrir de golpe la puerta de la habitación 610.
—Definitivamente durmió en esta habitación—
La multitud lo siguió, ansiosa por ver pruebas, pero la habitación estaba impecable. No había rastros de que Marcela había estado allí...
y si tiene que luchar para ser feliz qué haci sea ..excelente historia felicidades escritora
ella quiere tener un amor que sea para ella que la quieran a ella ..no le importo el dinero del príncipe ella solo quería una familia que estuviera ahí y darle un buen ejemplo a su hijo que trae en sj vientre ..
y si tienes razón ya no te dejes humillar por nadie quiere a ti misma y sal de ese infierno que estas viviendo ..
excelente historia..que destino le traerá la diosa de la luna ..
Aún está inconclusa, a ver cuándo la termina la escritora.
Éxito.
porque ella es la qur se cuesta con tu novio que ya no lo es ..
mujer abre los ojos por una vez en tu vida no seas tan ingenua...
excelente historia