Un Final Feliz Para Los Villanos.

Iris estaba en su habitación, llorando al tener su hermoso vestido manchado de vino, su madre la trata de consolar y le dice que ella misma irá a hablar con la reina, para hacerle saber lo malas personas que son Rael y Cecile, Iris solo continua llorando, pero, si su madre va con la reina, sería bueno, así la reina sabrá que ella solo es una víctima de Cecile. Pero, en el palacio, al día siguiente, la reina a ido a ver a Rael, pues quiere averiguar que relación tiene con Cecile, además de que durante la noche, después de la fiesta, Robert le dijo el problema que había causando; Erika es quien la deja pasar a la reina, mientras Rael esta en la sala, revisando los detalles de una espada que guarda en una caja de manera, cuando la reina entra, cierra la caja y se pone de pié esperando que la mujer se siente primero y se sienta también.

- ¿que la trae a este lugar, su majestad?

- linda espada, debe ser suya o ¿es para alguien especial?

- es mía, fue un regalo. Aun no hay esa persona especial.

- claro ¿que hay de la señorita Hamilton? Si sabe que es la prometida de mi hijo ¿cierto?

- lo se, no entiendo porque la menciona, si he hablado con ella, es porque me ha ayudado mucho y somos compañeros en la academia.

- compañeros que llegan y se van juntos de un baile, creo que hay algo más.

- majestad, yo la traje al baile, porque su prometido, prefirió traer a la amante, creo que le reclama a la persona equivocada.

La reina, aprieta los labios, pero deja salir un suspiro.

- aun así, debió elegir otra chica.

- no se preocupe alteza, yo no haría nada, no me comparé con su hijo ¿sabe usted con quien durmió anoche?

- ¿que esta insinuando? Mi hijo es un chico decente.

- si, por eso saco a escondidas a la señorita Scott en medio de la noche...que decente.

La reina se puso de pié para salir de ese salón, nunca se había sentido tan insultada, mucho más que la última vez que hablo con Cecile, pero claro que Robert la va escuchar y por supuesto que esto, se lo hará saber al Rey, un invitado tan descortés no merece estar en su palacio, además de que, no importa lo que diga el Duque, piensa cancelar el matrimonio con Cecile, no piensa dejar que una mujer como ella manche el nombre de la familia real, por andar metiéndose con otro hombre.

Cecile ha estado durmiendo hasta tarde, pues después de llegar de la fiesta, no pudo dormir pues no dejaba de pensar sobre los grandes cambios que han habido, sobre todo, con Rael, que la ha estado ayudando mucho, incluso recuerda el beso en su mano, levanta su mano y observa donde Rael le había besado, sin poder evitarlo, un leve sonrojo se notó en sus mejillas. Sandy quien ya había entrado llevando el desayuno, sonríe.

- esta pensando en cierto príncipe rubio ¿verdad?

- ¿que? N-no, no es eso, yo no he pensando en él.

Desvía la mirada, estando nerviosa, no debería sentir nada por él, no sabe ni como avanzará la historia o si, Rael seguirá estando de su lado.