Un amor casi imposible, donde uno le huía por seguridad y el otro le seguía sin cesar hasta que se cansó.
El profesor de filosofía, serio y tranquilo, se dejó llevar por la pasión que despertó una torta afrodisíaca junto a su "Rusita" sin saber que hubo consecuencias. Al sentirse abandonado y buscarla, sin éxito; decidió disfrutar de extensos viajes para olvidarla.
Ella disfrutó la mejor noche de su vida, teniendo que huir en la mañana, llevándose consigo un pedacito de él. Pero por problemas familiares, demoró en volver a España.
Ahora deben bautizar a su ahijada e inevitablemente, volverán a verse... ¿Qué pasará? ¿Sus sentimientos seguirán intactos? ¿Qué dirá Isaías cuando sepa el secreto de Eliani?
NovelToon tiene autorización de Tamara Gallo para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Una rusa y un Español
Isaías Belmonte
El ruso y mi hermosa mujer salieron directo al despacho, mientras Mairu y yo intercambiamos un par de miradas curiosas por esa rara interacción, pero pude notar a Konstantin celoso y Eliani de igual forma, aunque quisieran disimularlo...
— Creo que seremos una familia interesante—dice mi amiga riendo.
—Pienso lo mismo.— digo sonriendo y volviendo a ver por donde se habían ido.
—Así que...— la miro y espero sus siguientes palabras— Eres padre.
—Sí—sonrío orgulloso— Mi rusa tuvo a cuatro bebés.
— Cuatro son muchos— dice ella
—Lo sé, pero es normal en mi familia—le informo— Mi madre también tuvo cuatrillizos y yo soy uno—me señalo —Dos de mis hermanos tuvieron mellizos y trillizos.
—Ustedes todo lo hacen a lo grande—ríe y asiento.
—Hablando de mi familia— hago silencio y saco mi celular del bolsillo para leer los mensajes que me han enviado— Debo ir a contarles.
—Claro— afirma— Te deseo suerte.
—Gracias— la abrazo una última vez en forma de despedida y me dirijo a la puerta principal para irme de una vez.
No quiero seguir retrasando una noticia que impactará a más de uno, pero será satifactorio ver las caras de mis hermanos hombres, ya que sin querer y en una única oportunidad, les gané en el número de bebés.
¡No quiero imaginar si esto pasa nuevamente! Además de que claramente, Eliani me castraría, yo mismo querría hacerlo por el sufrimiento que debería pasar.
Sin embargo, quiero evitar un nuevo embarazo por varios años, solo para aprovechar del tiempo con ella y disfrutar de mis bebés en paz; y es que, si volviera a embarazarla, tal vez viviría lo que me perdí, pero no viviría un bonito amor que debe crecer día a día y ser conquistado de a poco, ya que sé, que tiene una gran culpa y yo no ayudo en nada.
Lo pensé por varios minutos y al principio quise ignorarla para hacerla sufrir, pero la verdad es que sufro más yo que ella y no vale la pena.
Ya hemos desperdiciado demasiado tiempo lejos, para estar cerca y vivir fingiendo que no nos conocemos, cuando es todo lo contrario y encima, somos conscientes del cariño que ambos nos tenemos, contando principalmente los celos que sentimos al escuchar o ver algo que no nos gusta. Así, como cuando escuche que Konstantin dijo que su mano derecha buscaba cualquier escusa para hablar con mi rusa o cuando ella me vio abrazando a su futura prima.
Ya dentro del auto, lo enciendo y en mi celular presiono el número de Emilio, la llamada suena en curso durante unos segundos hasta que contesta.
📲—Hola.— dice jadeando y solo espero no haber interrumpido una sesión pasional. Mientras espero su respuesta, acelero y empiezo el viaje.
📱— ¿Interrumpo?— cuestiono para saber si debo cortar o no.
📲—Estaba haciendo ejercicio. ¿Qué pasa?
📱—Necesito verte, urgente.— digo con calma, pero al mismo tiempo ansioso.
📲—Estoy en casa. ¿Quieres venir o nos vemos en otro lugar?
📱—En diez minutos estoy allí.
📲—Isaías, ¿Estás bien?— pregunta con un toque de preocupación en su voz.
📱—Mejor que nunca y quiero que seas el primero en saberlo. —sonrío como idiota a pesar de que él no puede verme—¿Me harías un favor?
📲—Claro, dime.
📱—Pide una reunión familiar con extra urgencia en la Mansión de la abuela, así ella no sale.
📲—De inmediato. Te espero— dice cortando la llamada y yo solo puedo pensar en las tantas preguntas que puedan hacer.
Aprieto el volante con fuerza y es lo único que necesito para volver a centrar mi mente en lo importante, mi mujer e hijos. Unos que sola tuvo que cuidar en el embarazo y estos meses, pero ya no, ahora estoy yo y no me apartaré de su vida, así lo nuestro no funcione.
Somos padres y por esas pequeñas vidas, corre nuestra sangre. Una Rusa y un Español, formando un hermoso futuro y estando en la gloria, o así me siento yo.
En minutos, llego a la mansión de mi hermano y él me está esperando en la entrada.
Puedo ver un poco de asombro al verme llegar en auto, pero sonríe y se cruza de brazos.
A penas apago el motor, me bajo y voy directo a abrazarlo, haciendo que ponga una de sus manos en mi frente.
—¿Qué?— pregunto extrañado por su acción.
—Estoy viendo si tienes fiebre porque es muy raro que tú des esas muestras de cariño.— alza una de sus cejas
—Relamente estoy feliz y todo lo debo a tu locura.
—Debes recordar que soy más cuerdo que mi esposa.
—Es cierto y ahora que lo pienso, se debe a ella y no a ti.
—De repente me siento ofendido— volteo los ojos.
—¿Ella está?
—Sí— afirma Emi. —En la sala jugando con las niñas — dice girando sobre sus talones y abriendo la puerta para que ambos entremos.
Las risas de mis sobrinas no se hicieron esperar y ahí estaban, tres pequeñas niñas y una mujer adulta, haciendo cama redonda en los sillones.
—Esto ya no parece una sala, sino un campamento— digo llamando la atención de mi amiga.
—Algún día lo entenderás— se río y afirmo.
—Ya que lo mencionaste— empiezo y ambos adultos me miran— descubrí que tengo hijos. —emito logrando que queden en silencio, por lo que primero pienso que es un shock la noticia, pero luego creo que no.
Por alguna razón, ninguno de los dos parece sorprendido e intercambian miradas cómplices.
¿ELLOS SIEMPRE LO SUPIERON? Es la única pregunta que puedo plantearme ahora mismo.
—Sé lo que estás pensando— inicia Emilio— pero no, no lo teníamos confirmado, solo supusimos eso.
—¿Eso, qué?— pregunto tranquilo porque en realidad no me enoja.
—Qué tendrías tu vida en algún momento, más que nada, luego de que Eliani desapareciera. No sé, siempre pensé que te habías fijado en alguien más— dice él y Lady se golpea la frente con su mano.
—¿En serio dices eso?— le pregunta ella a su esposo.—¿No se te ocurrió que esos hijos sean de Eliani?—le cuestiona bastante duro.
Veo que el favoritismo por su amiga, inclina una obvia balanza imaginaria que ninguna "nueva chica" podría ganar.
—¿Eliani?— pregunta él confundido—¿Cómo podría embarazarse de mi hermano?
—No sé, ¿teniendo relaciones?— dice sarcástica, mientras me río de su absurda pelea— ¿Recuerdas cómo me hiciste a las trillizas?
—No— niega con su cabeza— pero acepto si quieres ayudarme a recordar—bromea pícaro.
—¿Terminaron?— indago riendo— Les agradezco por esa torta afrodisíaca.
—Un placer— sonríe mi amiga— El ingrediente secreto fue mi idea— se toma todo el crédito.
—Bueno, y por eso serás madrina— aviso y ella se levanta del sillón para abrazarme, pero vuelve rápidamente porque las bebés están despiertas.
jajajajaja 😂😂😂