Por Ella Y Por Mí

Los padres de Elizabeth, no pudieron hacer nada, ella ya era una adulta y había terminado sus estudios con honores

Román habló con ellos y los convenció de que se casaría con ella cuando tuviera el dinero necesario para hacer una gran boda

Román se mudó con Elizabeth, al principio a ella le era difícil pasar tanto tiempo sola, después de que ella consiguió un empleo se acostumbró a que él estuviera viajando

Román, para no perder comunicación ni que el amor entre ellos se acabará, la llamaba varias veces al día

Rocío era una mujer muy hermosa, a pesar de tenerlo todo era muy amable y cariñosa, ella sabía que su esposo solo se había casado por interés, pero no le importó, ella lo amaba y estar a su lado era lo que más quería en el mundo.

Román para que ninguna de sus dos mujeres se diera cuenta de la existencia de la otra, les compraba los mismos perfumes, joyas, vestidos, carteras, etcétera

A Elizabeth le decía que los regalos eran de segunda mano y que no se preocupara por lo que gastaba, él no quería que ella investigara más a fondo de su fortuna.

A Elizabeth no le importaba el precio de los regalos, ni que fueran de segunda mano, ella no hacía preguntas, solo lo recibía con mucho amor

Rocío le pidió a Román para tener un bebé pero él no aceptó, tenía planeado divorciarse cuando cumpliera dos años de casado

Tener un bebé sería otro compromiso con la cual él no podría acabar, él amaba a Elizabeth y lo único que deseaba era que los días pasaran rápido, para terminar con Rocío

- Rocío, aún no quiero que tengamos un bebé, por favor esperemos un par de años más, tener un bebé es una responsabilidad muy grande.

A Rocío no le gustó su respuesta, ella dejó de cuidarse sin que Román se diera cuenta, pero como no quedaba embarazada, fue a su médico y se hizo varios exámenes para ver si ella podía consebir sin problemas, el médico le hizo los exámenes y le aseguro de que todo estaba bien

Luego de eso siguió intentándolo, pero nada, volvió a ir al médico y este le dijo que llevara a su esposo

- no puedo doctor, él no quiere que tengamos hijos aún

- Y por qué no se ponen de acuerdo su esposo se molestará si usted hace esto sola

- no me importa si se molesta, ya después de que mi bebé nazca él sera el hombre más feliz del mundo

Además, él se la pasa más afuera que en casa y me aburro demasiado, ya con un bebé las cosas cambiarían, no me sentiría tan sola.

- la entiendo, pero tiene que ver el porqué no queda embarazada

Rocío se puso a pensar, ellos jamás usaban condon, ya que según él, ella se estaba cuidando, pero como él no confiaba en nadie, prefería correrse afuera.

- bueno señora, tendrá que buscar la forma de convencer a su esposo

- ya sé lo que haré

Rocío salio del hospital y le ordenó a uno de sus seguridad que le consiguiera una pastilla para drogar a su esposo

Al tener la droga en la mano, estuvo pensando en cómo dársela sin que él se diera cuenta.

Una semana después se estaba celebrando el nacimiento de Adonis Giovani hijo de Mateo Giovani, Román acudió a Italia con su esposa

En el transcurso de la fiesta, Rocío aprovecho para drogar a Román, ella se encargó de que su esposo le hiciera el amor y se corriera dentro de ella.

Cuando ya se había cumplido su objetivo, Rocío le rogaba a Dios para que todo saliera tal y como ella había planeado.

- Señor por favor, esta es la única oportunidad que tengo para quedar embarazada, que lo que e hecho no haya sido por el gusto. Rogaba Rocío

A la mañana siguiente, Román no recordaba lo que había sucedido, le dolía mucho la cabeza

- creo que bebí demasiado, no aguanto el dolor

Al ver a su esposa a su lado empezó a recordar lo que había sucedido esa noche

- rayos, me olvidé de Elizabeth, tengo que llegar hoy mismo, pero ¿cómo, haré con Rocío?

Rocío al verlo preocupado, pensó que era por ella y tenia temor preguntarle, Román la miro a los ojos y le preguntó

- cariño, tengo que salir rápido, por la noche tengo que firmar un contrato con un cliente muy importante

Rocío respiro aliviada

-tranquilo amor, puedes adelantarte, yo me quedaré dos días más si no te molesta

Román le dio un beso, se arreglo lo más rápido que pudo y se despidió de sus amigos

- Gio, cuida de mi esposa, ella se quiere quedar unos días

- tranquilo amigo, en mi casa esta bien protegida, antes de que te vayas, quiero que hagamos un trato

- ¿qué trato?

- quiero que la primera hija que tengas se comprometa con mi hijo

Román se echo a reír

- deja de hablar boberias Gio, ya me tengo que ir

- no te dejaré salir hasta que lo prometas

Al ver que se estaba demorando mucho, Román acepto, él lo tomó como una broma

- bien bien, es un trato

- affare fatto.

En el transcurso del viaje, Román se puso a pensar en lo que había hecho

- ¿cómo cree Gio que involucraría a una hija mía con su familia?, no estoy loco, sé a lo que se dedican

Román llegó por la noche con un diamante Rosa que le había mandado hacer a sus dos mujeres, cada vez que le hacía un regalo a Rocío también le hacía una Elizabeth.

- feliz cumpleaños amor. Dijo el besándola y dándole vueltas.

- Gracias amor, pensé que ya no vendrías

- ¿cómo crees?, es tu cumpleaños no podría faltar en este día tan especial

Esa noche hicieron el amor, al contrario de Rocío, Elizabeth sí se estaba cuidando para no quedar embarazada, pero para darle una sorpresa a Román también había dejado de cuidarse, ella también se sentía sola cada vez que él salía en sus viajes de negocio.