FEROMONAS DE VENGANZA (EL OMEGA DE LA MAFIA)

El restaurante al que fueron era bastante normal, no era lujoso y tampoco había muchas personas, pero se veía acogedor. Además, también era un hotel.

El encargado era un hombre mayor y su esposa, saludaron de forma muy familiar a Linus, y cuando él presentó al omega asumieron que era su pareja.

—¿se quedarán a pasar la noche?

—no, solo queremos comer y despejarnos un poco.

—si es posible quiero bañarme.

—tu habitación está disponible Linus, pueden pasar y asearse mientras está la comida, hoy ofrecemos el menú especial.

—para nosotros serán 3, dos sin ajo ni demasiada cebolla por favor.

—entendido, Jenny te dará las llaves. Muchachos ¿ustedes que van a comer? —mientras el hombre tomaba la orden de los guardaespaldas que ya se acomodaban de forma natural, Kelsey solo observaba, estaba algo intrigado por todo lo que había oído y por la actitud de los dueños del lugar, no trataban a Linus como un millonario empresario, parecía que fuera un vecino más.

El alfa lo condujo a la habitación y se fue con la excusa de buscar algo que pudiera usar. Al volver Kelsey se encontraba en la ducha, dejó la ropa y salió.

—entra. —el alfa abrió la puerta, apenas regresaba y no tuvo tiempo de tocar.

—deberías tomar un baño tu también.

—¿te molesta mi olor? —Kelsey se acercó y lo olfateó

—no es muy fuerte, pero tienes el olor de su sangre, estabas un poco cerca, seguro te salpicó.

—de acuerdo me bañaré. —como si nada abrió uno de los cajones y sacó ropa de ahí.

—¿vienes seguido?

—no, pero la persona que usa esta habitación y yo somos de la misma talla, puedo usar un pantalón y una camisa prestada

—mm ok. —el mayor se fue y el Omega miró, había dos camas en ese lugar, además de algunos pósteres y objetos personales por aquí y por allá.

—creo que la persona que duerme aquí es cercano a los dueños, ¿un hijo? —llamaron a la puerta diciendo que la comida estaría lista, Kelsey aprovecho para interrogar a la mujer, supo que hace unos años Linus se quedó con ellos, al parecer les ayudó mucho y cuidaba de su hijo mayor que ahora se encuentra trabajando en el extranjero.

—te ves cansado querido, podemos traerles la comida aquí y descansen, las sábanas están limpias y nadie usa está habitación, solo nuestro Gus cuando viene de visita.

—muchas gracias, señora. Nosotros podemos pasar por la comida.

—oh descuida, lo traeré encantada, Linus viene muy poco y cuando lo hace no trae a nadie aparte de los chicos, estamos felices de que te trajera.

—gracias. —el alfa salía ya vestido, Kelsey se rio por lo bajo, se veía muy diferente vestido con ropas tan informales y normales, además con su cabello mojado.

—¿que es lo gracioso?

—si una foto tuya así se filtra la prensa enloquecería.

—atrévete si puedes...

—mi batería murió, que lastima. —la mujer se fue y el alfa se sentó.

—si quieres puedes descansar un poco antes de irnos.

—¿no vas a preguntarme nada?

—¿Estás listo para hablar?, no lo parece.

—tenía mis dudas, pero creo que deberías saberlo si quiero que me ayudes y utilizar tu influencia.

—entonces escucho. —la llegada de su pedido los interrumpió, después que dejaron todo, Kelsey no parecía querer hablar solo comer, el alfa solo sonrió y lo dejó. Después de comer todo y alabar la buena comida el alfa bajó los platos, al volver el omega comenzó a narrar.

—¿Has oído el mito de la familia sanguinaria Sinclair?

—creo que todo el mundo ha oído algo de ellos: una familia de asesinos sin corazón, incluso el más pequeño de ellos es un asesino profesional; dicen que el primer Sinclair vendió su alma y la de sus descendientes al demonio a cambio de poder y riquesas sin fin, hay muchas historias de miedo basadas en ellos, pero es sólo un mito.

—no lo es, yo pertenezco a esa familia, última generación de asesinos; Moon Sinclair; ese es mi verdadero nombre. En aquel entonces era uno de los 3 favoritos a heredar la mafia sangrienta.

—¿ni siquiera sé que me sorprende más, saber que esa mafia es real o que tú seas parte de ella?

—te entiendo, y tengo como demostrarlo, en las leyendas dicen que quienes son miembros de esa familia, poseen una distintiva marca en su cuerpo, se supone que es prueba del pacto diabólico. No sé si eso sea cierto, no me interesaba la historia de mis ancestros, pero... —el omega se giró y levantó su camisa dejando ver una marca roja en su espalda media, no era más grande que la palma de su mano, tal como en la portada del libro que Linus citó, había una cruz invertida y un par de feroces alas. Ya sea por incredulidad o curiosidad él tocó aquel lugar, la protesta de Kelsey se oyó inmediatamente.

—N...no lo toques, ese lugar es muy sensible todo el tiempo.

—perdón, solo quería saber...

—no es un tatuaje.

—ya me di cuenta... —el omega bajó su camisa y se giró de frente hacia el alfa.

—¿quieres tiempo para procesarlo?

—estoy bien, continúa.

—me entrenaron para matar desde que tengo memoria, a mis 12 años, tuve mi prueba final, D.J Imbech era mi maestro luché contra él y le gané, murió por las heridas unos días después, su prometida era una de los 3 sabuesos de madre.

—¿crees que por venganza mató a mi hermano?

—estoy seguro que fue así, aunque no pretendía matarlo, ellos sabían lo que ese enfrentamiento significa, esa maldita desgraciada, haré que se lamente hasta de haber nacido.

—Kelsey. —el omega suspiró y palmeó su rostro para calmarse como sabía que el alfa le iba a pedir.

—ya estoy calmado... después de eso, hice muchos trabajos, jamás fallé, hasta que me ordenaron asesinar al político que Lewis protegía.

—¿así fue como se conocieron?

—exacto, él anticipó mi aparición y recibió la herida en lugar de su protegido, no solo eso, él no murió, perdí mi oportunidad por culpa de Lewis, no solo esos mi récord perfecto de muertes con un solo tiro se había arruinado, sino que había fallado al matar a mi presa, estaba tan enojado que lo convertí en mi objetivo, estaba seguro que después de deshacerme de ese molesto guardaespaldas matar a mi presa sería fácil. Fui al hospital para terminar el trabajo, pero él ya me esperaba, y de alguna forma volví a fallar.

—sabía que ocultabas parte de la historia, pero esto no lo vi venir. ¿como terminaron saliendo?

—si oculté cosas mientras te contaba nuestra historia, pero básicamente fue sobre mi, lo demás pasó tal como te lo conté, él y yo apostamos: si yo lograba matarlo a él o a su cliente, y a cambio de 3 fallos, yo saldría con él.

—la tenacidad de Lewis me sorprende demasiado, aunque me sorprende más que aceptaras.

—era demasiado orgulloso, confiaba muchísimo en mis habilidades, y quería matarlo con todas mis fuerzas, jugar con él lo hacía divertido. Haría más emocionante cuando llegara su final por mis manos, era todo lo que podía pensar.

—tu pensamiento era como el de un demente.

—estaba muy perdido en aquel entonces, en el entrenamiento te preparan mental y físicamente para todo, ese entrenamiento desequilibra a cualquiera, yo intenté matar a mi madre 3 veces, odiaba a esa mujer con el alma, pero nunca pude ganarle, y me internaron durante 6 meses en un manicomio especial de la familia Sinclair, ese lugar era el infierno.

—te torturaban, son unos malditos desgraciados, por eso estabas tan susceptible con lo de mamá. Perdona por haberte recordado esa terrible experiencia.

—eres sorprende... (Tan parecido y diferente de Lewis al mismo tiempo)

—no entiendo

—yo me entiendo. Volvamos a Lewis y yo, perdí la primera apuesta, y tenía que salir con tu hermano, él hizo lo que le dio la gana y eso me molestó, yo ya tenía pensado matarlo esa noche, y seguí con mi plan: puse veneno en su copa. —la expresión del alfa lo decía todo, Kelsey entendía que no era fácil para él oír todo eso, pero no se detenía en su narración.

—una tonta que pasaba le tiró la copa encima y se salvó.

—¿intentaste matarlo en cada cita?

—no en todas, solo como hasta la décima.

—¿cuántas veces apostaron para salir tantas veces?

—muchas veces, el problema es que en el tiempo que pasé intentando matar a Lewis y fingiendo que todavía lo quería matar; yo no me reporté con los Sinclair ni siquiera una vez, así que enviaron a un sabueso por mi.