MI LOBINO AMOR

#ALEX

El domingo temprano desperté, me seguia doliendo el vientre, las piernas, era como si hubiera corrido una maratón y mi cuerpo lo padecía. Quería levantarme pero me faltaban fuerzas, por lo que solo me quedé acostada.

Mire mi celular y tenía cientos de mensajes de las chicas.

Por lo que las llamo.

📱AL FIN APARECES.

Me dicen en coro.

📱Me enferme, tuve fiebre.

Les cuento.

📱SUPUSIMOS QUE APROVECHASTE PASAR CON HECTOR.

Escucho a Jime

📱Él me cuido

Les cuento.

📱AHAAAA, TE MIDIO LA TEMPERATURA.

Grita Débora.

📱SOS LOCA.

Le digo con cariño.

📱POR CIERTO DONDE ESTAS, PASAMOS POR TU DEPA Y NO ESTABAS.

Me cuenta Jime.

📱ESTOY EN EL DEPARTAMENTO DE HECTOR

Les dije, se produjo un silencio.

📱PASA LA DIRECCIÓN, YA VAMOS.

Me dice Jime.

📱Bien.

Le respondí cortando la llamada y le pase mi ubicación.

Suspiré levantándome, me dirigi al baño camino sin ganas, lave mis dientes, me di un baño y al salir ví una nota sobre la mesa de luz.

"VOY A LLEVAR A MI MASCOTA A LA CASA DE MIS PADRES, REGRESO A LA NOCHE" HECTOR.

Suspiré al leer eso, me hubiera gustado despedirlo, pero entendía que aquí no podía tener una mascota asi.

Al salir del cuarto en todo el departamento reinaba el silencio, ví unas cajas en un rincón con mi nombre, al revisarlas encontré mis libros entre otras cosas, al parecer anoche se ocupó Héctor para sacar mis cosas de mi viejo departamento.

Miro la hora ya son cerca del medio día, se me pasó el tiempo volando, nunca duermo tanto, siempre me levanto temprano para hacer en casa lo que no puedo durante la semana por trabajar.

Sonó el timbre y me dirigi a atender, las chicas son rápidas cuando quieren.

-TENIAMOS QUE VER POR NOSOTRAS. Grita Jime ni bien abrí.

-¿ESTA HECTOR? NO QUEREMOS INTERRUMPIR. Dijo Débora con una sonrisa.

- PASEN, NO ESTA. Las invito.

-GUAU ES ENORME. Admira Jime.

- TE TRAJIMOS REGALOS. Sacude Débora una bolsa.

-¿NO TE LLAMO MANUEL? Me pregunta Jime

- PORQUE LO NOMBRAS... ESE NI DEBE APARECER... AUNQUE SE PRESENTO EN CASA INCREPANDO A ALEX... MENOS MAL TE SALVO HECTOR. Comenta Débora.

- NO ME CONTASTE. Le dice Jime.

- NO ME DISTE TIEMPO HABLANDO TODO EL RATO DE DANTE. POR CIERTO JIME LE ENVIO REGALOS, QUE PERFUMES, QUE UNA COMIDA EN SU CONSULTORIO, QUE UN EQUIPO PARA QUE ESCUCHE MUSICA. Me cuenta Débora.

- VAMOS A COMER, TENGO MUCHA HAMBRE. Llamo su atención.

Ellas hablan fuerte y aceleradas

- ES QUE EL ME SALVO, ES SERIO PERO TIENE UN LADO AMABLE. Se justifica Jime.

- TE ARREGLAREMOS, POR TU CUMPLE IREMOS AL MEJOR LUGAR. Comenta Débora.

Sentí una extraña sensación, como si algo me detuviera, juraría que podía escuchar en mi cabeza a Héctor diciéndome que me quedé.

-PODEMOS PEDIR Y COMER AQUI. Les dije a las chicas.

-BIEN, PERO DE TODOS MODOS TE ARREGLAMOS PARA LA FOTO. Me señala Jime.

"PERO QUE PERR@" Le escucho decir a Débora.

-¿Qué sucede? Le pregunto al ver su cara mirando su celular y me enseña

Mi media hermana subió un vídeo de fotos recopiladas de mi, las más horrendas, vergonzosas, con la excusa que me saludaba por mi cumple con la leyenda de "a mi querida hermana mayor por ser tu cumpleaños". En una se me veía recién levantada con el pelo todo despeinado y una blusa larga grande manchada con salsa, en otra que me tomo justo que me estaba por comer una pizza con la boca abierta, en otra donde me caí al chocar con una puerta de vidrio por mirar mi celular y no ver donde iba, y así muchas fotos que se ve ella me tomo, solo con él fin de avergonzarme.

"ES UNA MALDITA VÍBORA" Expresa Jime al ver.

- AHORA MAS QUE NUNCA TE VAMOS A PONER BELLA Y SALDREMOS. Me dice Débora.

- No dejaré que me afecte, no me interesa que haga o deje de hacer Reina. Les digo a las chicas.

- Te vas a dejar ensuciar así. Expresa enojada Jime.

- No me interesa porque ahora estoy con Héctor y pase la noche con él el viernes. Les cuento.

-¡¿QUÉ?! Preguntan en coro.

- Como lo escuchan. Les digo.

- ESPERO TE HAYAS CUIDADO. Expresa Jime.

- SI, AUN ME DURA LA INYECCIÓN. Les respondo.

- MENOS MAL. Comenta Débora.

-YO LE ACONSEJE ESO, COMO MANUEL VIAJABA MUCHO, Y NUNCA TENIA UNA FECHA FIJA, ASI ESTABA PREPARADA. Expresa Jime.

La verdad que siempre me cuidaba por si pasaba, pero con él no era así, no se daba. Pienso.

-Y cuenta ¿Qué tal? Me pregunta Débora.

-Se cuenta el pecado, no como fue. Responde Jime.

-¿Por qué? Le pregunta.

-Si dispersas los atributos del que te gusta otras lo desearan. Le dije Jime.

-Pero somos amigas, eso no pasa con nosotras. Le aclara.

-Ya olvidaste esa historia que vimos. Le dice Jime.

-Ese fue porque el novio era un baboso, un don Juan. Héctor se lo ve más serio, con la mirada como si pusiera una barrera y dijera no te arrimes. Le responde Débora.

-Entonces si fuera accesible te lo lanzarias. La mira Jime.

-A mi me gusta Sam, es más dulce, además no me fijaría en el novio de una amiga, y si él me tira flores le contaría para que sepas la clase que es, porque así como me lanza a mi, quien quita que lance a otra. Comenta Débora comiendo esa semilla de girasol que me molesta que lo haga porque deja por todos lados la vaina.

-Es normal que te duela todo el cuerpo. Les pregunto para sacarles de su discusión.

Se giran a mirarme.

-Ahaaa... Eso significa que te dió para que tengas y guardes. Grita Jime.

-Te dió un anillo. Me señala Débora mirándome la mano.

No me había percatado de ello, tenía un anillo de un metal dorado oscuro con franjas en la mano derecha, con una imagen grabada en forma de un lobo.

-No me había dado cuenta, ese debe ser el regalo que me dió y no pude abrir. Les digo sorprendida.

-Se ve más valioso de lo que te dió Manuel. Comenta Débora.

-Manuel contigo era un tacaño, pero este se ve muy caro, me lo prestas. Me pide Jime.

-Esta atorado. Le comento al no poder sacarme.

Entre las dos me maquillan y eligen un atuendo para sacarnos fotos por mi cumple.

- Vamos a demostrar que eres hermosa. Escucho decir a Jime.

Se ve que le molestó la actitud de Reina de querer hacerme menos con las fotos que subió, con la excusa de saludar por mi cumple, podía haberlo hecho en privado, en su lugar público como para que todos vean, sabe que no soy de estar en esos temas, si no fuera por mis amigas, ni me enteraba.

-Papa nos invita a una comida, como odio esas comidas, siempre para presentarnos el hijo de alguien, acompáñanos. Escucho que me pide Débora al llegarle un mensaje.

-Bueno, no tengo mucho que hacer y ya no estoy tan dolorida. Le respondo, al no poder negarme a su pedido, después que me están ayudando tanto.

Nos dirigimos donde le citaba su padre, al llegar mira serio a sus hijas por verlas llegar conmigo.

-Hola. Saludan con coro.

-Buenas. Lo saludo a su padre.

-Alex supe que es tu cumple, felicidades. Me dice su padre sorprendiendome que sepa.

-Gracias. Le dije, sentandome junto a mis amigas delante de él.

-Estábamos con ella por su cumple cuando llamaste. Le dice Jime a su padre que la miraba de manera intensa.

-Tengo una comida con un socio que está con sus hijos, esperaba que su presencia haga más llevadera la reunión. Le dice su padre.

-Mientras no quieras que seamos sus parejas no hay problema. Le responde Jime.

-¿Quién sabe? Expresa su padre arreglando su traje antes de levantar la mano y saludar a los que venían.

Veo que llega un señor de rasgos asiáticos junto a dos chicos muy altos y musculosos.

-Bienvenido señor Leo, tomen asiento, es un placer poder al fin reunirnos, ellas son mis hijas, Jime y Debora, ella es una amiga Alex. Presenta nervioso su padre.

El señor saluda de manera amable con una sonrisa.

-Mis hijos, Jano y Daniel. Presenta el señor.

Nos saludamos de manera cortés, traen unos aperitivos, el padre de Jime se centra en hablar con su socio, los chicos no se fijan en ellas, solo están con su celular.

Nos enviamos mensajes entre nosotras.

#No se para que nos invita mi padre. Comenta Jime.

#Deben estar haciendo un cateo de calidad. Agrega Débora.

En ese momento veo a Héctor llegar con una chica y se sienta en una mesa mas adelante.

#Ya viste quien llegó. Me escribió Jime.

Me temblaban las manos, el corazón me late acelerado, me sentía incómoda.

-Alex, ¿Verdad? Escucho que llama mi atención uno de los hijos del señor Leo.

-Si. Le respondí.

-Daniel. Me recuerda su nombre.

-Si, Daniel. Le respondí.

-Tu anillo, tiene la imagen de un lobo.

-Asi es. Le digo.

-Estoy haciendo una tesis sobre ellos. Me cuenta.

-¿Qué estudias? Le pregunto.

-Quiero ser guardabosques, en el lugar donde vivo, hay una reserva natural y tienen lobos, por eso mi interés. Me cuenta.

-Es muy linda carrera, fue mi segunda opción. Comento, tratando seguir la conversación, pero no puedo evitar mirar de reojo a Héctor como interactua con esa chica.

-¿Cuál fue el primero? Me pregunta.

-He, soy veterinaria. Le comenté.

- Pensé en ello, pero me gusta más el exterior, se me hacía que te lim ita a estar en un lugar ser veterinario. Me dice.

- No es así... También puedes hacer visitas a domicilio. Le comento.

Me llegó un mensaje de Jime.

#Hector no deja de mirarte como hablas con Daniel.

La mire, ella me señala con los ojos en su dirección.

-Permiso, nos vamos al baño. Se incorporan las dos invitandome a ir.

-No tarden, llega la comida. Le avisa su padre.

Nos encaminamos al baño.

-Esta con otra como si nada, y parece no molestarle que estás hablando con Daniel. Comenta Jime ni bien ingresa.

-¿Qué querés que haga? Le digo suspirando.

-No reaccionas, no te vas a pedirle que te explique. Me dice.

-¿Para qué? Al parecer solo fui conveniente mientras estuvo de visita, la verdad que nunca averigüe si tenía pareja o tuvo. Le respondo.

-Por lo que veo su regalo fue un "Gracias por lo vivido, hasta la vista bebé, si te veo no te conozco". Expresa Débora, repasando el labial ante el espejo.

-DESPIERTA ALEX, CULPA QUE SOS ASI, QUE NO TE DAS TU LUGAR, MANUEL TE HIZO LO QUE TE HIZO, YA ES TIEMPO QUE DEJES DE BAJAR CABEZA, ME DA GANAS DE ABOFETEARTE PARA QUE REACCIONES. Me reta Jime.

Los ojos se me llenan de lágrimas, aún el dolor de la traición de Manuel me duele, me esfuerzo para fingir que no me afecta pero me duele. Me sentí muy bien entre los brazos de Héctor, lo ví como mi caballero salvador. Y ahora es como si estuviera suspendida en el aire, cayendo, sin encontrar el fin, sin tocar el piso.

-Lo siento Alex, no mido mis palabras, es que me da bronca que te pase esto. Me dice Jime abrazándome.

-Vamos a bailar, invitemos a los chicos, así se despeja Alex, y de paso festejamos tu cumple. Propone Débora.

-No estoy de ánimos. Les digo.

-Vamos, eres joven, debes estar con diez chicos antes de comprometerte. Me dice Débora.

-¿Quién dice eso? Le pregunto colorada.

-Lo leí por ahí, si ellos lo hacen, ¿por qué no nosotras?. Me dice.

-No, no es mi estilo. Me siento cansada emocionalmente, prefiero alejarme un tiempo del sexo opuesto. Le digo.

-Vamos aunque sea nosotras. Insiste Débora.

Ella solo quería salir y no la dejaba su padre sin mi.

Asentí, no tenía ánimos, pero ella nunca sale, siempre está estudiando.

Regresamos a la mesa la comida estaba servida, el padre había pedido unos canelones de jamón y queso con verdeos.

-Gracias por la comida, nos vamos. Anuncio Jime.

-Si van a ir a algún lugar pueden acompañarlas Daniel y Jano, por seguridad. Dijo el señor Leo.

-Vamos, las acompañamos. Dijo Daniel que era el más grande, sin esperar.

-Hola, llegué a tiempo. Apareció otro chico.

-Él es nuestro primo, Antonio, Lo presento Daniel.

-Entonces dónde vamos a bailar. Dice entusiasmado, el recién llegado.

Jime suspiro contrariada.

-Nosotras tenemos novios, no esperen nada...

Decía Jime, pero la interrumpe Daniel.

-Solo queremos divertirnos, estamos de visita, o lo otro era estar encerrados, nos comportaremos. Pide con cara de suplica.

-Mejor que nos acompañen, así no nos molestan otros chicos. Agrega Débora.

-Ven, todos salimos ganando. Dice entusiasmado Antonio.

Jano estaba más concentrado en su celular, se ve que solo seguía a los demás.

Nos fuimos a un tipo disco- bar, dónde el que quería comer se sentaba en una mesa y disfrutaban de alguna banda en vivo o se iba a bailar en otra parte del mismo lugar.

Mientras estábamos ahí mirando apareció Manuel.

"AHORA QUE YA NO SALES MAS CONMIGO, EMPIEZAS A ANDAR CON EL QUE SE TE CRUCE" Me grito en la cara totalmente ebrio

Me sentía muy avergonzada, y para completar veo a Héctor que presencia todo el show.