Embarazada Por Error

Pov Axel.

Tenia tiempo sin sentir ese vacío en mi interior, pensé que la profunda herida que me dejo su partida ya había cicatrizado, pero ver la foto que nos tomamos el día en que nos esteramos que seriamos padres volvió a instalar ese dolor en mi pecho, los recuerdos de todos nuestros momentos juntos invadieron mi mente.

-Cariño, lo siento no sabia que habías guardado las fotos de Melisa en ese álbum- La voz de mi madre hace que me vuelva a concentrar en el camino.

-No pasa nada mamá, estoy bien- trato de darle mi mejor sonrisa para no preocuparla.

- ¿Sabes? Las madres tenemos un sexto sentido y podemos percibir cuando nuestros hijos no están bien, así que no trates de engañar a tu madre-

-Estoy bien mamá, pero no te niego que ver esa foto me afecto un poco, por un momento sentí que la oscuridad y el dolor se apoderarían de mí, pero mire los ojos de Valery y me tranquilice –

-Axel, pienso que fue un error que llevaras a Val a esa casa. La verdad es que debiste venderla hace años, no creo que te haga bien vivir ahí y si Valery encuentra las cosas de Melissa ¿Cómo se lo vas a explicar? Al menos las hubieras donado - me mira seriamente.

-Mamá las pertenencias de Mel están bajo llave y no me desharé de ellas. -respondo un poco irritado.

-Axel eres mi vida y no quiero volverte a ver sufriendo. Hijo esto no te hará ningún bien. –

-Por favor mamá dejemos el tema- suplique.

-Esta bien Axel, pero déjame darte un consejo, querido no te estanques en el pasado o en el que hubiera pasado si Melissa no tenia ese accidente, debes dejar ir el pasado y mirar el valioso tesoro que tienes enfrente. Ahora vas a ser padre y tu hijo te dará las fuerzas para seguir adelante, pero te voy a pedir un favor si no estas seguro que podrás abrirle el corazón a Valery y amarla como se merece, no la ilusiones, si veo en algún momento que tus acciones pueden lastimar a ella o a mi nieto, te juro por lo más sagrado de mi vida que eres tú, que la apartare de tu lado- Me lanza un advertencia y sé que sus palabras no son en vano.

-Mamá jamás jugaría con los sentimientos de Val, ella es la madre de mi hijo-

-Exacto, por ese motivo se merece que seas sincero con ella, habla con Valery y dile la verdad. Sabes que entre cielo y tierra no hay nada oculto, es preferible que se entere de tu boca que esa casa la compraste para vivir con Melisa y que ella la decoro a su gusto a que se entere por otra persona y lo pueda malinterpretar-

-Lo pensare, pero ya es hora de que la reina entre a su castillo-

Cuando la veo entrar a casa arranco el auto, necesito un trago urgente y hablar con alguien. Llego a su apartamento sin previo aviso y toco el timbre como si mi vida dependiera de ello, pero no hay respuesta. Al tercer intento Franco abre la puerta a medio vestir.

- ¡Carajos! - grita frustrado - Axel más te vale que sea algo importante interrumpiste una buena follada-

-Eres muy joven para ser tan amargado, relájate eres doctor y sabes que enojarse es malo para la tensión- pone los ojos en blanco y se corre de la puerta para dejarme pasar.

-El sexo es bueno para la salud y gracias a ti cancele mi sesión favorita de ejercicio- ahora soy yo quien pone los ojos en blanco.

Me tiro en el sofá mientras él prepara unos tragos y empiezo a contarle todo, su rostro de endurece a medida que le digo lo que hice.

-¿En qué diablos estabas pensando cuando tomaste esa decisión?, tu mamá tiene razón es una pésima idea que vivas en ese lugar. - Grita furioso, lo veo cerrar los ojos y hacer el ritual que siempre realiza para tranquilizarse.

- Axel, yo no solo perdí a mi hermana ese día también mis padres murieron, puedo entender tu dolor - me tiende otro vaso de whisky el cual desaparezco de un solo trago, ya perdí la cuenta de cuantos vasos llevo. – Pero no importa cuánto los echemos de menos, los muertos no van a volver. Debemos seguir viviendo y dejarlos descansar en paz. -me da un par de palmadas en la espalda- Tienes un futuro por delante, tienes la oportunidad de tener esa preciada familia con la que tanto has soñado, no lo eches a perder. Date la oportunidad de ser feliz y esta vez hazlo en serio.

Ahí estaba mi querido hermano Franco siempre apoyándome cuando más lo necesito.

-Gracias- le doy un abrazo.

-No tienes nada que agradecer, para eso estamos los amigos- suelta una sonrisa ladeada- pero si de verdad me lo quieres agradecer no vuelvas a dañarme una noche de diversión o mejor convence a Val que no nos demande. -bromea.